febrero 08, 2007

El sueño de la razón produce monstuos

Cierta vez, alguien me propuso ir a un museo que exponía una serie de grabados de Goya. Bueno, dije y encaminamos el rumbo. Ahi me enteré que Francisco, Pancho para los amigos, no sólo habia pintado "La maja desnuda" y su correspondiente versión pacata y vestida. Estos grabados, correspondían a la serie llamada "Los Caprichos" y en ellos se podían observar toda clase de deformaciones, mutilaciones, pesadillas, monstruos y demás imágenes dignas de cualquier pensamiento traumático inducido por alguna película de terror moderna. Hay otra serie llamada "Los desastres de la guerra", de igual tenor.

La sensación fue de sorpresa primero, contemplación después y más tarde ganas de salir de alli lo más rápido posible.

La maestria de Pancho en provocar, fue genial. Nunca me había impresionado tanto algo y no podía sacar esos grabados de mi cabeza que, por momentos parecían emitir sonidos de gritos y lamentos incluso.

Terminé pensando que siempre alguien nos puede sorprender por un lado o por otro y que el lado oscuro de todos en algún momento emerge, y agarrate Catalina!!! A la mierda con todo!!!

3 comentarios:

Clementina dijo...

Gran verdad May...ese lado oscuro es latente en todo, si la luna lo tiene imagináte las cosas que reposan en el mundo con claridades aparentes. De más está decir que en mi caso particular tengo una inclinación a valorar en el arte esas manchas negras de tinta que sólo pueden povenir de ese lado oscuro que nombrás. Ya lo dijo el poeta antes que yo..."en las cosas inmundas encontramos encantos", supongo que algo de eso hay.

Besos

Mayfly dijo...

Ahora me pregunto y te pregunto. Cuando salen cosas de ese lado oscuro a la luz, dejan de ser oscuras? Y no me refiero al efecto lumínico, se entiende no? Digo... si hay algo tenebroso y oscuro en alguien, al sacarlo a la luz se convierte en algo que empieza a mutar en lindo, ameno, etc, etc.???
Yo creo que si y que es un proceso natural...

Más adelante, ampliaremos!!!

Siga en contacto.

Clementina dijo...

Supongo que no se vuelve lumínico, es una oscuridad alumbrada que empieza a proyectar otra cosa. Y sí, es lindo, si todos los poetas, escritores y artistas que me gustan no hubieran volcado esa oscuridad en alguna parte, me hubieran privado de la dicha de conocerlos, y la dicha, como alguien ya ha dicho, no es una cosa alegre.

Sigo en contacto, por supuesto.
Besos again.